Trabajar o invertir en un negocio multinivel no es una mala idea, pero debes tener en cuenta algunas precauciones para colaborar con alguna. El MLM (Multilevel Marketing) se fundamenta en la venta directa y la red de asociados (personas que se encargan de la distribución). El modelo es una clase de “alternativa” a las ventas por mayoreo.
Aunque uno de los principios es olvidarse del trabajo presencial, el cambaceo puede ser parte de las actividades de un empleo “formal”; la diferencia es la variabilidad de ingresos (por comisiones). De acuerdo a The Balance, menos del 1% de las personas que participan en un negocio multinivel alcanzan el status Blue Diamond (nivel máximo de ventas).
Existen mejores prácticas básicas para tener un alto índice de conversiones. La primera es: tú debes llegar a la oferta laboral, no ella a ti (podría tratarse de una estafa). Los negocios multinivel también pueden ser trampas para despistados (disfrazadas de ofertas de empleo). A diferencia de un trabajo convencional, la mayoría de los multinivel solicitan una inversión inicial (cuota para comenzar el “negocio”); por lo tanto, es importante realizar una investigación exhaustiva de la organización en la que destinarás tu dinero y tiempo.
Los ingresos se logran a partir de las ventas directas o las ventas de los distribuidores. Al inicio de business, podrían hacerte entrega de lo siguiente:
- Kits de negocio (catálogos, productos, muestras, manuales de capacitación, folletos)
- Documentos y contratos
- Acreditaciones oficiales (credenciales, correos corporativos, etc.)
- Entrega de dispositivos (celular, computadoras, tablets, etc.)
- Cortesías o muestras
De acuerdo a dinero.com, la rentabilidad de un negocio MLM está entre 20% y 50% (considerando un volumen de venta alto). Para lograr el mínimo de éxito, debes conocer el producto y evaluar si eres capaz de distribuirlo (de acuerdo a tu experiencia laboral). Esto conlleva a preguntar sobre el plan de compensación del negocio (pago de viáticos, gratificaciones, beneficios, premios por ventas, etc.).
Una vez que ingresas a la red, cerciórate de que el negocio se trate de vender un producto real (con un esquema sencillo). Si el objetivo de la organización es demasiado confuso, probablemente se trata de una estafa para reclutar a más “afiliados” (Esquema Ponzi). Investiga el negocio y estudia a profundidad todos los contratos y papeles que debas firmar. SI NO HAY CONTRATO, HUYE.
Mucha gente olvida que por hacer cambaceo también se pagan impuestos, ya que las comisiones son consideradas por la ley como parte de un salario. Otro tip es no pretender grandes ganancias con el menor esfuerzo. Incluso, esta forma de “autoempleo” requiere mayor disciplina que un trabajo de 9 a 6.
El problema no es el modelo (ya que facilita convertirse en inversionista a bajo costo) sino las personas que integran el esquema. Antes de entrar a una red de inversión se necesita: (mínima) experiencia junior en ventas, ahorros de respaldo y expectativas realistas de los ingresos a obtener. A continuación enlistamos algunas ventajas y desventajas del trabajo multinivel.
Ventajas
- Es más fácil la ruptura con un negocio que con un empleo.
- La magnitud de tu negocio dependerá del esfuerzo dedicado.
- Si realizas una inversión de bajo riesgo, puede servirte como una fuente de ingresos extra a un empleo de tiempo completo.
- Bajos costos de inicio (a diferencia de comenzar un negocio desde cero).
- Flexibilidad académica. No se necesita una formación académica rigurosa ni una edad.
- El afiliado contribuye de forma directa en la construcción de la marca.
Desventajas
- Requiere una constancia superior a la de un empleo (esfuerzo = pago).
- Percepción negativa de los ingresos bajos (esto desanima a los afiliados).
- Crear tu cartera de clientes sin apoyo de la empresa.