¿Quieres saber qué diseñadores de moda han influenciado tu outfit de oficina? Cierto, la moda es para las clases adineradas. Sin embargo, vestir a los sectores trabajadores es un reto para la industria.
Un diseñador no sólo hace “ropa bonita”, también crea cambios sociales. En el fondo, la producción de tendencias no es una actividad naif sino la búsqueda de practicidad y comodidad (aunque se trate de unos tacones de más de 13 cm). No olvidemos que vestir es una necesidad primaria.
En tu trabajo, la moda puede manifestarse en distintos grados (desde la uniformidad hasta la multiculturalidad), pero todos influenciados por un movimiento creativo. Los cambios en la silueta femenina y masculina son el efecto más evidente.
Todo esto se ha apoyado del “viejo” star system (culto a las celebridades) ¿Cuántas veces la chica de recepción ha intentado usar leggings como una Kardashian? o ¿el gerente insiste en vestir como Ryan Gosling en Cannes? Bueno, detrás de esas celebridades hay pilares del diseño que definen el concepto de clásico.
A continuación, te presentamos a cinco diseñadores que están en tu guardarropa y los portas diario.
COCO CHANEL y la comodidad femenina
Todo se reduce al traje sastre tweed. Es la gran aportación al guardarropa femenino, porque sintetizó las necesidades de la mujer del siglo XX: sofisticación y practicidad.
Coco Chanel inició la masculinización de las mujeres: acortó faldas, introdujo jerséis y fue pionera en el uso del pantalón. Una vez aceptadas sus innovaciones, permitieron a las esposas laborar durante la Segunda Guerra Mundial.
Además, definió la elegancia contemporánea con el “descubrimiento” del negro. Seguramente tienes un vestido negro preferido ¿no?. En el siglo XIX, el color sólo era para viudas y monjas. Hoy es un básico para un outfit elegante.
No todo fue ropa. ¿Usas el cabello corto? A Chanel también se le debe el corte garçon; el mismo que popularizó Hepburn, Seberg y Twiggy.
YVES SAINT LAURENT y el universo andrógino
Si Chanel le había dado masculinidad a la mujer, Saint Laurent le dio el toque andrógino. En 1966 diseñó el primer tuxedo para mujeres, incorporando el término unisex. El smoking femenino fue un avance tremendo en la lucha por la igualdad de género y el inicio del reconocimiento de la diversidad.
¿La mujer viste masculino o femenino? Da igual, el punto era la simplicidad. Incorporó bolsillos al atuendo femenino, para que prescindiera del bolso (una atadura innecesaria).
¿Has visto Belle de Jour (1967)? Pues todo lo que viste Catherine Deneuve es invención de YSL. ¿Usas cuero y sintéticos en tu día a día? Pues este diseñador fue el primero en incorporar el S&M a una prenda.
Jumpsuits, mascadas, seda en colores estridentes… en resumen, al menos una mujer en la oficina tiene alguna prenda directamente influenciada por este creativo.
JEAN PAUL GAULTIER y la hipersexualidad del vestir
Jersey marinero, chamarras entalladas y muchas prendas metálicas son su sello. En pocas palabras, el final de siglo fue diseñado por él. ¿Has imitado a Madonna? Has imitado a Gaultier. El actual furor noventero ha rescatado la mayoría de sus logros.
Con él, se introdujo el urbanismo al código formal. ¿Cuántas veces has retado a Recursos Humanos con una chamarra de mezclilla? En territorio Gaultier, los hombres adoptaron algo de femenino y las mujeres se hipersensualizaron.
Dinamitó los estándares de “belleza”. El sobrepeso, color de piel, estatura, ni cualquier razón era obstáculo para ser trendy. Al contrario, lo diferente es lo más atractivo.
TOM FORD y GIORGIO ARMANI: el femenino mundo masculino
También el atuendo masculino ha sido modificado por la moda, pero recientemente. Comencemos por Armani. Agregó feminidad al guardarropa de los varones, eliminó los excesos decorativos (como las corbatas escandalosas de tu papá o los pantalones baggy) y se limitó a la ligereza y minimalismo italiano.
Incluso, un estilismo descuidado debe ser elegante. Como Chanel, estableció normas inalterables: el negro y azul marino son la primera opción. La razón fue la aspiración a la figura esbelta.
Con sus diseños para American Gigolo (1980), convirtió al traje desestructurado en el uniforme del hombre contemporáneo.
Tom Ford también ha echado mano del cine para proyectar su trabajo. La elegancia del James Bond de Daniel Craig tiene mucho de él. ¿Cuántos empleados en tu oficina aspiran a ser un gentleman inalcanzable? La base es el slim fit y el detalle controlado (como las camisas “escotadas”).
Con Ford, la silueta de los hombres se remarcó igual que la femenina, debido a la influencia de la tendencia skinny (iniciada por Hedi Slimane y Trainspotting). En general, la moda se convirtió en una preocupación para todos los sexos.