Mapa mental: ¡la mejor técnica de estudio que puedes utilizar!

Un mapa mental es un colorido diagrama visual que te permite recoger (y condensar) información. De acuerdo con Tony Buzan, gurú de la mnemotecnia y los mapas mentales, esta herramienta activa el pensamiento de todo el cerebro debido a que implica tanto actividad lógica del hemisferio izquierdo como actividad creativa del hemisferio derecho.

Hay tres características básicas que debe tener el diagrama para ser considerado un mapa mental: una imagen central (el núcleo o tema de estudio), ramas desprendidas del tema central (los temas principales, cada una de un color distinto) e imágenes o palabras clave sobre cada rama.

Algo como esto:

Imagen vía Pinterest

Pasos para hacer un mapa mental

Material:

  • Papel (de preferencia blanco)
  • Lápices de colores o plumones
  • Un objeto de estudio
  • Mente abierta y mucha imaginación

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En la parte central de tu hoja, dibuja un elemento que represente el tema que estudiarás. Utiliza varios colores. Comenzar con un dibujo te permitirá activar tu imaginación y detonar asociaciones en tus pensamientos. También es válido comenzar con una palabra, solo asegúrate de resaltarla con una sombra, volumen o algún ícono.

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Partiendo del centro, comienza a dibujar las ramas hacia el exterior con sus respectivas palabras clave e ideas importantes.

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Conecta todas las ideas mediante coloridas ramas, de esta forma tu cerebro comenzará a crear una estructura de asociación que te facilitará recordar toda la información a medida que te alejes del centro del mapa mental.

Algunos tips útiles

Traza líneas curvas y asimétricas

Estas formas resultan más atractivas para tu cerebro y captan mejor tu atención.

Usa una sola palabra clave por línea

Cada concepto tiene una amplia variedad de opciones para asociar y conectar, así que de esta forma tendrás mayor libertad para explorar nuevas ideas y pensamientos.

Una imagen vale más que mil palabras

No hay más que decir, ¡emplea todas las que puedas!

Otros ejemplos

La técnica del mapa mental no sirve únicamente para asuntos académicos. También puedes integrarla en tu vida laboral y personal: para planificar presentaciones e informes, para organizar tu día, para hacer las compras, para emprender tus proyectos… ¡las posibilidades son infinitas!

Imagen: Paul Foreman
Imagen vía Pinterest