¿Sólo hablan de Luis Miguel La Serie en tu trabajo? ¡Conoce por qué!

¿Episodio tras episodio incrementa la euforia en tu oficina por Luis Miguel La Serie? Eso se debe a que este programa encaja con varios targets, diferentes generaciones y desde sectores económicos distantes.

Aunque Netflix jamás hace público el número de vistas de sus contenidos, es posible calibrar el impacto de la serie. Por ejemplo, sólo el primer episodio transmitido en Estados Unidos alcanzó una audiencia meritoria de 958 mil espectadores, las reproducciones en Spotify de canciones de Luis Miguel incrementaron un 194% y hashtags como #LuisitoRey se han posicionado en las tendencias de Twitter.

La característica de este servicio online es que se basa en un sistema de preferencias para dar luz verde al contenido original. El big data es la principal herramienta para hipersegmentar el consumo, mediante el análisis del gusto de los usuarios. Esta dinámica reduce los riesgos de fracaso.

A esto se suma la consolidación de una parrilla de contenido a bajo precio y que da la apariencia de diversidad. ¿Cuántas veces has recomendado una serie de HBO o descargada por Torrent y te preguntan “pero, está en Netflix”?

A continuación, te damos tres razones por las que no dejan de hablar de esta serie en tu oficina:

Star-system mexicano y el furor por los 90

En realidad, el gusto por el biopic no es exclusivo del mexicano sino del occidental promedio. Esto se debe a la idea de la imagen-huella del cine. ¿Qué es eso? La verosimilitud es un “contrato” entre el público y la producción, que invita a los primeros a no cuestionar la ficción y aceptarla como realidad (para disfrute ilimitado). ¿Te choca la gente que insiste en los errores de raccord? Es gracias a este “pacto”.

El problema de este simulacro es que muchas veces el público no distingue los límites entre la “realidad” y el discurso en la ficción. He aquí donde el periodismo de farándula hace su trabajo. Los espectadores ven la serie para obtener “verdades” sobre los rumores en la vida del cantante.

Además, nos encontramos en un boom retro por los 80 y 90, mezclado con la hipermodernidad del social media (no es casualidad el fichaje de Juanpa Zurita). El merchandising es redondo: la serie cautiva a millennials y Generación X por igual.

Distribución en Netflix y el “consumo inmediato”

¿Recuerdas cuando los servicios de streaming liberaban todos los episodios el mismo día? Aquella práctica fue la que celebraron todos los seriéfilos y que marcaba (según los especialistas) el final de la televisión convencional. No obstante, la tendencia duró poco.

En 2015, la plataforma Netflix comenzó a dosificar los capítulos disponibles. ¿Para qué retroceder hacia las prácticas del pasado? El objetivo es permanecer en el espacio público por más tiempo e incrementar las expectativas de consumo. La forma de distribución en streaming es una cuestión de mercado y “experimentos con la audiencia”.

“Biopic” por anécdota

El cine ha demostrado que las anécdotas funcionan mejor que los biopics monumentales de ascenso, éxito y declive. Si no puedes abarcar todo, limita la trama a un sólo tópico (menos es más). La elección de la relación padre-hijo es una fórmula acertada para el público latinoamericano (la serie Hasta que te conocí ya había explotado el recurso con el mismo éxito).

A esto se suma una aparente complejidad en la forma de contar la historia. Como en La vida en rosa (2007), los vaivenes entre infancia y adolescencia dan un aire de sofisticación a un producto que en origen es popular. ¿Para qué elevar la calidad si la serie tendrá gran audiencia sólo por ser Luis Miguel? Evidentemente para que conviva entre los temas de la misma sobremesa donde se comentan los episodios de Game of Thrones o de Westworld.

En resumen, el interés de tus colegas por Luis Miguel La Serie es el resultado de un conjunto de clichés que rodean a la cultura del oficinista nacional.

¿Qué tanto comentan esta serie en tu espacio de trabajo?