¿Cómo afrontar los efectos psicológicos del desempleo?

Muchas personas hemos pasado por una situación de desempleo
y ahora queremos explicarte cómo salir victorioso. Empezamos…

Has enviado miles de currículos, ya perdiste la cuenta de todas las entrevistas a las que has acudido.

Te sabes de memoria los exámenes psicométricos, pasas el primero, segundo y hasta el tercer filtro y después… no se vuelven a comunicar contigo.

Cada vez que esa tan anhelada llamada o correo no llega, vas perdiendo motivación, comienzas a dudar de tus capacidades, sientes que es el fin de tu carrera.

Y de pronto te encuentras postulándote a cualquier tipo de trabajo, ignorando horario, ubicación, y hasta sueldo… ¿Te resulta familiar? 

¿Qué es el desempleo?

Es un desajuste que se produce cuando existen más personas con necesidad de trabajar que vacantes disponibles en las empresas.

De acuerdo con datos del INEGI, la tasa de desempleo en diciembre de 2018 aumentó a 3.6 % de la población económicamente activa, la cual, en 2017 del mismo mes se encontraba en 3.3 %.

Sin duda, el desempleo es uno de los mayores problemas que afecta a México.

Pero no solo económicamente sino también de manera psicológica para sus individuos.

Las personas desempleadas corren el doble del riesgo que las personas empleadas de sufrir problemas psicológicos, tales como depresión, ansiedad, síntomas psicosomáticos, bajo bienestar psicológico y pobre autoestima”: Asociación Psicológica Americana.

Cuando buscas trabajo por primera vez o si has laborado durante varios años y de pronto te encuentras en una situación de desempleo, es probable que comiences a padecer una serie de alteraciones emocionales, psicológicas y sociales; las cuales a lo largo del tiempo serán perjudiciales para tu salud física y mental.

Pero… ¡no te asustes! Te compartiremos algunas maneras de sobrellevarlas para que logres usarlas a tu favor.

Los síntomas que podría ocasionar el desempleo son:

Pérdida de confianza

Te sientes deprimido y fracasado, dejas de creer en ti, sientes que vas cayendo en picada, experimentas miedo y no te consideras capaz de establecer objetivos a futuro.

Comparación

Crees que te estás quedando atrás, piensas que tus amigos han logrado mucho en su carrera y siguen avanzando y tú simplemente te minimizas.

Negación

Tratas de convencerte de que no pasa nada, utilizas frases como “necesito un descanso” o “ya me hacían falta vacaciones”.

Aislamiento

Te alejas de familiares y amigos, prefieres quedarte en casa a dormir, ver Netflix y checar redes sociales.

Ansiedad e irritabilidad

Te vuelves adicto a revisar tu correo, bolsas de trabajo, y no sueltas tu teléfono por si te llaman.

Poco a poco esa ansiedad se convierte en angustia y después en ataques de pánico.

 

Tienes dificultad para dormir, te sientes débil y cansado todo el tiempo, presentas dolores de estómago y todo el tiempo te sientes nervioso o molesto.

Todos esto se vuelve un círculo vicioso ya que te sientes así por la falta de trabajo, pero puede ser que estas manifestaciones también están causando que no lo consigas.

Hay 3 tipos de lenguaje que juegan un papel muy importante en una entrevista de trabajo: el verbal, el corporal y el sensorial.

Puedes ser un excelente orador y actor, pero la vibración no se puede disfrazar y toda esa falta de confianza que tienes la transmites.

¿Cómo salir victorioso?

Crea un compromiso contigo mismo

Define tus objetivos, verbalízalos, regístralos, escríbelos con tu puño y letra.

Conócete y reconócete

Identifica tus habilidades, resalta tus logros y tu futuro potencial, tienes que creértela. Es válido que llores todo lo que necesites pero no niegues la situación en la que te encuentras.

Aprende a diferenciar entre aislamiento y retrospección

Está bien si necesitas tiempo para procesar y aprender de ti mismo.

Disfruta el tiempo libre que tienes, llénate de energía, camina descalzo en el pasto, salte a la lluvia a mirar hacia el cielo (toma un baño después para evitar enfermarte)

Convive con la gente que quieres, pero no te hundas en el pesimismo.

No te culpes

Reflexiona sobre lo sucedido,  ¿qué parte te tocó a ti?, ¿descuidaste algo?, ¿qué estuvo fuera de tus manos?

Y aprende de ello para que no se vuelva a repetir.

Sé agradecido

No olvides que en su momento ese trabajo te sostuvo y es probable que esa experiencia te ayude a conseguir el siguiente.

Cuida tus palabras

Evita llamarte fracasado, decreta lo que quieres conseguir.

No te tomes las cosas de manera personal

Cada que acudas a entrevistas, ten en cuenta que la mayoría de los reclutadores son fuertes con los candidatos para identificar cómo reaccionan bajo presión.

Sal de tu inactividad

Planea el futuro pero sin fantasear, el tiempo se puede convertir en tu mayor enemigo.

Si te sientes muy ansioso…

Haz ejercicio físico y de respiración. Acuéstate en el suelo por 5 minutos, , inhala 2 segundos, mantenlo por 8 seg. y exhala en 4 seg. Repítelo 10 veces a lo largo del día y desintoxica tu cuerpo evitando los azúcares y carbohidratos.

Acude con un terapeuta laboral, él te puede ayudar a atacar el problema particularmente en el área profesional. Afortunadamente existen algunas alternativas que te pueden sacar del apuro mientras encuentras una oportunidad:

El seguro de desempleo es un programa social del gobierno de la CDMX. Te apoya con un incentivo económico y capacitación a personas que hayan perdido su empleo de manera involuntaria. 

También puedes optar por el retiro de afore por desempleoAlgunas instituciones como Banamex te brindan facilidades para solicitar tu retiro sin necesidad de acudir al IMSS.

Es importante mencionar que solo puedes solicitarlo una vez cada 5 años y tener 46 días o más de estar sin actividad laboral. 

El desempleo solo es una transición, habrán muchos tropiezos a lo largo de tu carrera, asume tu corresponsabilidad y sigue adelante.

Tal vez aún no has aprendido lo que necesitas para crecer,
pero recuerda que el no intentarlo es el peor fracaso.