Sostener es tan difícil como soltar

¿Te ha pasado que te has encontrado en algún momento “esperado” o en una relación “deseada”  y de repente no sabes qué hacer con eso? Sostener es tan difícil como soltar.

Incluso llegas a pensar que no te lo mereces o que estás ahí por casualidad, ¿lo has experimentado?

Sí, mucho hablamos del soltar pero poco del sostener y paradójicamente nos apegamos más a eso que muchas de las veces no podemos tener o parece alejarse de nosotros pero tampoco sabemos disfrutar o comprometernos con lo que llega, ¿verdad que es curioso?

Huimos, eso ocurre, porque en el fondo hay un profundo miedo a sentir, porque probablemente no estamos acostumbrados a disfrutar o porque tememos mostrar vulnerabilidad o pensamos que no somos dignos de ser felices y nos saboteamos de manera inconsciente.

Para aprender a  sostener es importante que sepas que la realidad no está afuera de ti sino adentro y que independientemente de la situación externa lo más importante será tener el valor de permanecer en receptividad a todo lo bueno y bonito que hay para ti.

Independientemente de que las cosas no salgan como tú quieres, no renuncies a tu deseo, quédate sin escapar porque finalmente el deseo te habita y tú te llevas a donde vayas.

Arriésgate a sentir, a vivir, a quedarte, el miedo es tan solo una cortina de humo y lo que das, te lo das, si sueltas hazlo con toda la consciencia y no porque tu inconsciente comande una profecía autocumplida que suena a: “más vale aquí corrió que aquí quedó”.

Todos estamos rotos de algún lugar, todos queremos ser felices pero pocos son los que corren el riesgo.

Sostén tus emociones, sostente fuerte porque lo que no es asumido no es redimido y como decía Carl Jung: “lo que niegas te somete y lo que aceptas te transforma”.

La próxima vez que quieras huir y renunciar pregúntate qué es lo peor que podría pasar si esta vez te quedas.

Por: Rosario Cardoso

Soy Rosario Cardoso,  te invito mediante la práctica de yoga corporativo, el desarrollo humano y el mindfulness organizacional, a reconectar contigo y con tu cuerpo, a conocerte y ser tu mejor versión. 

Rosario_cardoso