Recibir y revisar mercancía conforme a guías de remisión, facturas o pedidos.
Almacenar productos en estanterías o ubicaciones designadas.
Preparar pedidos para su envío o despacho.
Realizar inventarios periódicos (cíclicos o generales).
Mantener el orden y limpieza del almacén.
Etiquetar y clasificar productos según normas internas.
Reportar incidencias de productos dañados, faltantes o sobrantes.
Operar equipos de carga (como montacargas, patines hidráulicos, etc.) si cuenta con capacitación.
Cumplir con las normas de seguridad y prevención de riesgos en el almacén.
Recuerda que ningún reclutador puede pedirte dinero a cambio de una entrevista o un puesto. Asimismo, evita realizar pagos o compartir información financiera con las empresas.