¿Te consideras una persona exitosa? ¿A qué se refiere el término y como establecer si lo eres o no?
Sigue leyendo y descúbrelo.
¿Has escuchado hablar de Malcolm Gladwell?
Este gran escritor es el autor del libro del que todo el mundo habla actualmente: Outliers. The story of success, –Los fuera de serie. La historia del éxito-
Gladwell afirma que los grandes personajes del deporte, finanzas, música y demás deben su éxito tanto a su genio particular y esfuerzo, como a las condiciones sociales que permitieron su despegue, como podría ser obvio, sin embargo agrega que son las fuerzas sociales las que también explican por qué, dadas ciertas oportunidades, algunas personas van a trabajar tanto más duro para aprovecharlas.
Citemos el caso de Bill Gates. Gladwell cita una serie de estudios que han encontrado un número mágico de horas para volverse muy bueno en algo: 10 mil horas de práctica. Según este autor, la práctica no es algo que se hace una vez que se es bueno en algo. Es lo que se hace para volverse bueno en cualquier ámbito.
En el caso de Bill Gates, Gladwell muestra cómo una serie de eventos afortunados le permitieron llegar con más de diez mil horas de práctica al momento en el cual abandonó sus estudios universitarios en Harvard para armar su empresa de software.
De todo esto Malcolm concluye que Gates obviamente es sumamente brillante, pero que sin aquellos golpes de suerte posiblemente no hubiera podido desarrollar su potencial como lo hizo.
¿Cómo llegar a lograr esto? ¿Cómo hacerlo?
Analicemos lo que fundamenta este autor. Él reflexiona sobre la alta proporción de genios matemáticos en universidades americanas que son asiáticos. Gladwell atribuye este fenómeno no a una habilidad matemática innata en los asiáticos, sino a que los chicos en muchos países de Asia están dispuestos a estudiar más cantidad de horas que sus pares occidentales, algo fundamental para rendir con los números.
¿La conclusión? Se debe a una herencia cultural de trabajo duro derivada.
En pocas palabras, creo que se necesita de una constancia para lograr nuestros objetivos. Primeramente fijarnos metas alcanzables, pero lo más importante, trabajar por y para ellas. Debemos buscar esos “golpes de suerte” para estar más cerca por ejemplo, de nuestro trabajo soñado.
¿Te consideras constante en lo que haces?
Fuente: http://educanet.edu.mx