Sobrevive a una ruptura amorosa en el trabajo

Tenías la relación perfecta en tu trabajo, se veían todos los días, a todas horas y el color rosa gobernaba en tu vida… hasta que terminó. ¡Sobrevive a una ruptura amorosa en el trabajo!

Nunca es fácil superar una ruptura; atravesamos por un proceso de duelo que puede ser muy lento. Bloqueas a la persona en redes sociales, tiras los recuerdos, evitas lugares donde pueden encontrarse, pero, ¿si trabajan en el mismo lugar? ¿Cómo superarlo?

  1. Mantente profesional

Habla con la persona en cuestión y trata de llegar a un acuerdo cordial y respetuoso de mantener una relación profesional en el trabajo.
Por imposible que parezca, deberás tratar a tu ex como a cualquier otro compañero. Mantén la comunicación amable y estrictamente profesional. Es el momento de poner en práctica tu inteligencia emocional y separar tu vida privada del trabajo.

  1. Sé discreto (evita chismes)

Cuando terminas una relación, es normal que quieras desahogarte, hablar mal de tu ex o llorar amargamente con quien se te atraviese. Pero ¡evítalo! En las rupturas de oficina, las reglas cambian.
Aléjate del chisme y evita contar detalles de tu separación a compañeros o jefe. Está en juego tu reputación y tú imagen.

  1. Limita las interacciones

Aunque tengas que convivir con esa persona, ser respetuoso, alejar tus emociones negativas y ser profesional, no significa que tengas que estar al pendiente de lo que hace o no ni en constante interacción con la persona.
Haz pequeñas acciones para evitarle; llega en un horario distinto, estaciónate lo más lejos que puedas de su coche, evita pasar por su escritorio o lugar de trabajo, etc. Parecieran actitudes infantiles pero en una ruptura reciente, son totalmente válidas.

  1. Canaliza tu energía

Probablemente te sientas triste, enojado o ansioso y es completamente normal. Pero antes de llegar a una posible depresión, canaliza esos sentimientos en algo positivo; en tu trabajo.
No será fácil pero es la oportunidad perfecta para hacerte cargo de un proyecto difícil, realizar distintas tareas o pendientes atrasados. Recuerda que el punto es distraerte y pensar menos en tu ex y más en ti mismo.

Recuerda que aunque no es una situación fácil, renunciar no siempre es la respuesta.

¡Demuestra tu amor propio y hacia tu trabajo! Tú sabes que lo mereces.