¿Cómo tener un buen liderazgo a distancia? Aquí te lo decimos

El trabajo remoto trae consigo una enorme cantidad de beneficios como el ahorro de tiempo en traslados a la oficina y, por su puesto, de desafíos, entre los que destacan el liderazgo a distancia.

Índice de contenidos:

¿Qué es el liderazgo a distancia?
Importancia del liderazgo a distancia
Características de un buen liderazgo a distancia
¿Cómo mejorar tu liderazgo a distancia?

Uno de los grandes cambios que trajo consigo la pandemia fue el cambio a trabajo a distancia, esto para poder continuar con nuestras labores sin tener que acudir a los centros de trabajo (claro, en los puestos de trabajo y actividades laborales que lo permitieron) y así disminuir los riesgos de enfermar.

Aunque la modalidad de trabajo remoto ya tiene varios años existiendo, fue hasta la pandemia que miles de empresas tuvieron que implementarlo, lo que nos ha llevado a vivir y conocer de cerca los diferentes lados del home office.

Y aunque para muchos el trabajar desde casa puede significar una bendición, para otros no tanto, ya que los retos de juntar el trabajo con el hogar suelen ser abrumadores.

Uno de los principales retos que afrontan tanto grandes como pequeñas y medianas empresas es el tema del liderazgo a distancia, ya que toma mayor relevancia en los equipos de trabajo remotos.

Mucho se ha mencionado que el mercado actual deja de demandar jefes para necesitar líderes, sin embargo, todavía es difícil discernir entre jefe y líder.

¿Qué es el liderazgo a distancia?


El liderazgo a distancia es la habilidad de dirigir y guiar a los equipos de trabajo que se encuentran trabajando en diferentes espacios, incluso diferentes entidades o hasta países.

Un líder se caracteriza por motivar, instruir, informar, guiar e, incluso, supervisar a todos y cada uno de los miembros del equipo, dándole seguimiento a sus proyectos y actividades.

Sin embargo, uno de los grandes obstáculos de liderar de forma remota es justamente las distancia, la falta de contacto entre el líder y los miembros del equipo.


Pese a que la finalidad del liderazgo a distancia y el presencial son la misma, los métodos para lograrlo cambian demasiado, incluso si el equipo de trabajo es el mismo.

Además, siguen existiendo miles de contratiempos que a veces no podemos ver, especialmente porque no solo se combinan las responsabilidades laborales y del hogar, también debemos ser consciente que nos encontramos en una etapa delicada, donde la alerta sanitaria nos ha llevado a redoblar esfuerzos en materia de higiene, las consecuencias en salud física y mental.

Todas estas situaciones también pueden propiciar una productividad atípica durante la modalidad home office, y es algo que tanto empresas como los líderes de equipo deben tener en mente.  

Importancia del liderazgo a distancia

Puede parecer que una vez que el riesgo de contagio disminuye o la mayoría de las personas estén vacunadas las actividades volverán a ser presenciales, sin embargo esto puede no ser así.

Las ventajas de trabajar en home office han demostrado ser varias, tanto para las compañías como para los colaboradores por lo que las probabilidades de que gran parte de las empresas decidan optar por esta modalidad o un esquema combinado, son muy altas.

Es por eso que debemos hacer de la tecnología nuestra aliada y ser capaces de adaptarnos a modalidades a distancia, presenciales o híbridas. 

Y el liderazgo es una de las habilidades que debemos aprender a llevar a cabo en las diferentes modalidades, especialmente ahora que se empezará a presentar más la necesidad de líderes capaces de guiar de forma remota a su equipo de trabajo.

Además, la llegada de nuevos colaboradores en teletrabajo necesitará de una guía firme, comunicativa y constante que pueda orientar durante el proceso de adaptación a la compañía, al puesto de trabajo y, probablemente, a la modalidad remota o híbrida. 

Características de un buen liderazgo a distancia

Es cierto que estilos de liderazgo puede haber muchos, y que lo que puede funcionar en un equipo en otro no, incluso a nivel individual, una persona puede responder perfectamente ante cierto estilo de guía y motivación, y otra persona tener necesidades totalmente diferentes.

Sin embargo, cuando a nivel equipo, el liderazgo está funcionando correctamente, es algo que se puede notar, y la mayoría de las veces comparten ciertas características, como:


Confiar. Creer en que cada empleado cumplirá con su parte del trabajo.

Delegar. Tiene mucho que ver también con la confianza, ya que estás brindando un nivel de responsabilidad a los miembros del equipo.
Definir procesos y objetivos. Es muy importante ser muy claros respectos a los objetivos que se quieren lograr, el cómo y bajo qué esquema o procesos.
Comunicar. No siempre es necesario contar cada momento de nuestro día laboral, pero hacer un resumen general de las actividades o del avance de los objetivos es importante para que los miembros del equipo se sientan en sintonía.
Dar retroalimentación. Cuando un proceso va bien, tiene fallas o áreas de oportunidad, también debe ser mencionado para que el equipo crezca profesionalmente.
Reconocer. Siempre que el trabajo, los objetivos y el equipo estén marchando bien, hay que decirlo, hay que reconocer el esfuerzo de todo el equipo.
Observar. Un buen líder es capaz de visualizar el potencial de todos sus subordinados, incluso el oculto, además de que es capaz de ayudar a desarrollarlo.

¿Cómo mejorar tu liderazgo a distancia?

Lo más importante es que un líder siempre busque cómo mejorar o nuevas técnicas para implementar, por lo que compartimos algunos consejos que pueden ser de utilidad.

Para poder ser un buen líder debemos empezar por nosotros mismos

Evalúate. Analiza tus fortalezas y debilidades como líder.
Actualízate. Investiga acerca de temas de gestión, de personas, de tiempo, de proyectos o de toma de decisiones.
Identifica. Establece qué cosas están bajo tu control y cuáles no, de esta manera podrás elaborar un plan para actuar ante las cosas que son importantes y en las que sí puedes colaborar.  

Recuerda hacer eso de la tecnología en caso de que sea necesario, ya sea una app o algún sitio en línea, ya sea para aprender o para poder organizarte de una forma más sencilla.  

Y, sobre todas las cosas, prioriza el bienestar de tu equipo.
Dedica algunos minutos a la semana para preguntar por su estado de ánimo, cómo viven la pandemia, las afectaciones que han tenido por la pandemia y si existe una forma de apoyarlos.