Bienestar: ¿cuál es tu forma? Preguntas que debes hacerte

Cuando hablamos de bienestar, seguramente llegan imágenes que tienen que ver con su significado o con el cómo te regalas equilibrio físico, mental, emocional y espiritual. Bienestar, ¿Cuál es tu forma?

El tema de wellness podría ser amplio pues hay una gran oferta de actividades, videos y libros en el mercado, sin embargo, nosotros no queremos que leas aquí algo que podrías leer en cualquier lugar porque nuestra intención primordial es que mientras nos lees puedas escucharte y reconectar con una parte de ti que probablemente hace mucho no lo haces,  de hecho hay una frase muy linda que dice: “La salida siempre está hacia adentro”, así que te invitamos a descubrir qué es eso que realmente puede hacerte sentir bien.

Me gustaría iniciar con una pregunta simple (dicen que la calidad de nuestra vida depende de la calidad de preguntas que nos hacemos, así que vamos a cuestionarnos).

¿Por qué es importante estar y sentirnos bien?

Cuando nosotros entramos en contacto con esas cosas que nos llenan el corazón, ya sea alguna actividad física o creativa, entramos en un estado de fluir y justo ahí es cuando la mente se aquieta y nos mantenemos en un estado totalmente presente y consciente reajustando así nuestro sistema nervioso.

Si estás invirtiendo toda tu energía y tiempo en algún problema del mundo exterior, te quedará muy poco para tu mundo interior y el sistema inmunológico no tendrá suficiente energía para la regeneración de tus células y neuronas, por tanto tu calidad de vida será pobre, así que tú eliges.

¿Realmente “no te da tiempo”? o más bien ¿No será que no “te das” el tiempo?

El bienestar va más allá de una actividad física, aunque trabajar con nuestro cuerpo siempre es una extraordinaria manera de empezar ya que cuando nos movemos generamos un montón de neurotransmisores que nos hacen sentir felices y con vitalidad pero hay algo más profundo.

A veces no nos regalamos este tipo de espacios porque estamos invirtiendo todo nuestro tiempo y energía en actividades que nos absorben y que además no disfrutamos, entonces nos perdemos de nosotros mismos y la idea que generalmente nos vendemos es: “es que no me alcanza el día”, “es que mi familia”, “es que mi jefe”, “es que el entregable”, “es que…”, y la lista puede ser inacabable, ¿pero y tu felicidad? ¿tu salud?

Piensa que el tiempo que vives en la queja y en las visitas médicas es el mismo tiempo que podrías invertir en salir a caminar y respirar, correr, hacer tu deporte preferido o meditar un poco.

Identifica cómo es esa brecha entre lo que dices que te gusta hacer y el tiempo que le inviertes y una vez que te des cuenta toma acciones inmediatas que nadie nunca hará por ti eso que tú no hagas.

¿Cómo es tu relación con la comida?

Quizás no seas muy consciente de esto que a continuación leerás pero nuestro cuerpo es un laboratorio y todo lo que nosotros comemos nos regala distinto estados de ánimo, por ejemplo, ¿cómo te sientes cuando te tomas una taza de café? Seguramente estimulado y despierto, ¿y cuando comes un muy buen corte de carne? Muy seguramente te aletargas y te da sueño por toda la energía que demanda el proceso digestivo de tu cuerpo.

El tema aquí es que las personas tomamos decisiones de acuerdo con nuestro estado de ánimo y lo que comemos nos produce dichos estados, si tienes sueño y cansancio por comer desmedidamente es probable que las decisiones que tomes no vengan desde una mente clara y por tanto no serán las más asertivas, y lo mismo ocurre cuando nos sobre estimulamos con cafeína o algunos otros alimentos y bebidas.

La invitación aquí es a que te hagas consciente de cómo es tu forma de comer e invitarte a que te preguntes si estás dispuesto a hacer algunos ajustes para regalarte una mente menos abrumada para tomar decisiones poderosas que saquen una mejor versión de ti.

¿De qué tipo de personas te estás rodeando? ¿te suman? ¿te restan?

Es importante observar cómo se siente nuestro cuerpo a lo largo del día según la compañía que tenemos, date cuenta que cuando nos rodeamos de personas instaladas en la queja, el juicio, la crítica, la agresividad, la negatividad o el victimismo es brutalmente desgastante, nos resulta muy cansado e inclusive podemos sentir malestar.

Si tienes la posibilidad de alejarte no lo dudes y por tu bienestar hazlo, si no te es posible sencillamente administra tu tiempo con esa persona lo más posible  e interactúa de manera muy puntual, esta es una forma de autocuidado.

Los seres humanos sumamos y restamos siempre, el punto aquí es saber qué ocurre más la mayor parte del tiempo no sólo con la interacción de otros contigo sino también de ti para con los demás.

¿Qué consumes digitalmente?

Cuando abres la aplicaciones de tu celular o en tu computadora ¿de qué te alimentas? Afortunadamente hay mucho para escoger en las redes, hay un montón de sitios que ofrecen audios o podcast que sin duda te relajarán o bien te dará una nueva herramienta.

Depende de ti el invertir tu tiempo de esta forma o stalkear los muros de las redes sociales de otros para tener tema de conversación entre amigos y colegas, si eliges lo segundo considera que es tiempo perdido, energía tirada a la basura, tiempo y energía que podrías invertir en ti y en construir esa mejor versión de la que hablábamos algunos renglones atrás.

¿Qué libro estás leyendo?

El bienestar tiene que ver también con este gran hábito: la lectura. No importa si lo haces digital o si como a mi te gusta sentir las hojas de papel y el aroma a libro, sólo hazlo aunque vayas lento, busca una buena historia o sea lo que sea que te guste leer y echa a andar tu imaginación. ¿Hace cuánto no lees un buen libro? ¿cuándo fue la última vez que leíste imparablemente de principio a fin?

Y bueno, esperamos que después de todas estas preguntas hayas logrado descubrir algo nuevo o recordado algo que ya sabías y habías olvidado y lo más importante: que hayas encontrado o reconectado con eso que te da bienestar.

No importa lo que hayas hecho o dejado de hacer, lo importante ahora es qué harás a partir de este instante. Toma de una vez por todas el volante de tu vida y si no estás cómodo en donde hoy te encuentras realiza pequeños ajustes en tus hábitos y verás cómo cada estarás cada vez viviendo más desde el gozo, estando bien, sintiéndote bien, haciendo las cosas bien y produciendo bien.

Por: Rosario Cardoso

Soy Rosario Cardoso,  te invito mediante la práctica de yoga corporativo, el desarrollo humano y el mindfulness organizacional, a reconectar contigo y con tu cuerpo, a conocerte y ser tu mejor versión. 

Rosario_cardoso

 

 

El poder de la palabra “NO” (cuestión de amor propio)