Los mitos educativos siempre existirán, sin importar el grado académico o el sector profesional en el que te desenvuelves, sería interesante replantearnos algunos juicios que hemos percibido constantemente sobre los estudios en la vida adulta.
No te quedes con ideas equivocadas acerca de la educación
A lo largo de nuestra vida es común que aceptemos algunas ideas sin cuestionarnos realmente qué es lo que las hace válidas. Escuchamos una afirmación, la vemos en distintos medios comunicativos, la repiten diversas personas de nuestro alrededor y un día terminamos por admitirla.
Sin importar el grado académico o el sector profesional en el que te desenvuelves, sería interesante replantearnos algunos juicios que hemos percibido constantemente sobre los estudios en la vida adulta:
8 mitos educativos que todos podemos desmentir:
1. Solamente con maestrías o doctorados conseguiré un gran empleo.
A todos nos encantaría seguir estudiando hasta el máximo grado escolar, seguro, sin embargo no siempre se tienen las posibilidades para hacerlo. Hemos oído el argumento de que a mayor formación y respaldo académico se obtendrá un mejor salario. Es probable, pero no es la única manera. Existe una gran variedad de cursos o diplomados de corta duración que te preparan para empleos con mucha demanda y elevadas remuneraciones.
Lo importante es mantener nuestros conocimientos y habilidades actualizados, estudiar constantemente y estar al pendiente de los cambios y nuevas tendencias.
2. Me dedico a un oficio, no necesito estudiar algo más.
En los últimos años, México ha sido uno de los países en donde más se sufre para cubrir vacantes de oficios calificados.
Hoy en día, es posible vivir en otro país desempeñando un trabajo en electricidad, construcción, agricultura o mantenimiento. Por ejemplo, en los últimos años ha crecido la tendencia de trabajar y/o estudiar en Canadá.
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3. Ya aprendí lo suficiente, no necesito seguir estudiando.
¿En realidad llegará el momento en que no necesitemos aprender algo más? Incluso un tema nuevo que no utilizarás a corto o mediano plazo puede ser trascendental en tu carrera.
¿Conoces la frase “Conectar los puntos” de Steve Jobs? Cuando abandonó la universidad, ingresó a un curso de caligrafía en Reed College. Conoció sobre las tipografías Serif y Sans Serif, aunque nada de eso lo aplicaría inmediatamente en alguna actividad. 10 años después, saber de esto fue lo que permitió una de las innovaciones fundamentales en sus sistemas operativos: incluir distintos tipos de fuentes en cada ordenador.
4. Estudiar ingenierías es difícil, además soy malo en matemáticas.
Sí, las materias de ingeniería no son fáciles, pero en realidad ninguna carrera es sencilla y relajada, ya que cada una tiene su nivel de complejidad. Por otra parte, con las múltiples oportunidades que se tienen en este sector, vale la pena el esfuerzo que demandan las matemáticas.
De acuerdo con el Instituto Mexicano para la Competitividad, la ingeniería mecánica y metalurgia se ubican en el tercer lugar de las carreras profesionales mejor pagadas, y la ingeniería industrial, mecánica, electrónica y tecnología en la posición número 6.
5. Me dedico a las ventas, ¿para qué estudio?
Las habilidades de negociación cada vez son más avanzadas, las estrategias cambian, y para mantenerte como uno de los líderes en el mercado es necesario entender cómo funcionan los comercios a cada momento.
En tiempos de crisis financieras, contar con aprendizajes especializados en ventas siempre brindarán una oportunidad de empleo, no importando el nivel de negociaciones que lleves a cabo.
6. El papelito no importa mucho.
Seguramente conocemos la historia de alguien que ascendió y obtuvo un alto puesto de una empresa sin tener un título profesional. No obstante, también sabemos gracias a la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económico (OCDE) que las personas que cuentan con un grado universitario reciben salarios mayores –al menos 25%– comparado con quienes sólo terminaron la secundaria.
Fuente: CNNExpansión
8. Me equivoqué de carrera y ni modo de estudiar otra.
¿Por qué no? Lo que más se requiere es voluntad para hacerlo. Hoy en día existe una gran oferta educativa en línea que se adecúa a tu ritmo de vida y que no necesariamente exigirá años y años de aprendizaje.
Además. cada vez son más los profesionistas que optan por estudiar una segunda carrera, en ocasiones complementaria a su área actual o, incluso, totalmente diferente, por lo que opciones hay muchas.
Así que ya lo sabes, no todo es como lo pintan, y no siempre todo lo que escuchamos es cierto, así que no te creas todos los mitos educativos que te han contado.